Hemos visto bastantes fotografías de fantasmas en los últimos tiempos. Había una pequeña chica que parecía estar al borde del ataque de una mano de demonio, y luego estaba el espíritu que se arrastró en esta selfie de Snapchat. Pero de todas las imágenes escalofriantes que hemos encontrado, esta imagen es una de las que provoca más escalofríos.
Anastassia Perets estaba hojeando un viejo álbum familiar cuando se topó con una foto de ella misma tomada cuando tenía cuatro años (ella es la que tiene los pantalones rojos de punta). En el fondo, otra niña parece estar abriendo una puerta. Parece bastante normal. Pero no había ninguna niña allí, bueno, al menos no viviendo.
Anastassia nos dijo: “Pensé que era un espejo o algo así, pero otra observación me mostró que no era así. Me asusté tanto que comencé a gritar y llorar y los vecinos pensaron que alguien debía haber entrado o algo así”.
Cuando más tarde, Anastassia les preguntó a sus padres acerca de la foto que tomaron en su casa, dijeron que nunca habían visto a la niña antes y confirmaron que ella era definitivamente un fantasma.
Más tarde, un psíquico le dijo a Anastassia que, sin que se lo incitaran, le decía que el espíritu de una niña la estaba siguiendo. ¿Cómo es eso para misterioso?