Recientemente se colocó un anuncio en la fachada de La casa de Aramberri, es una de las propiedades más aterradoras de la ciudad de Monterrey, y no solo por su oscuro pasado, sino por los fantasmas que la habitan.
La espeluznante historia redactada por Edy Doo, es la siguiente:
“El 5 de Abril de 1933, la vida de Antonia Lozano de 54 años y la vida de su hija Florinda Montemayor de 19, fueron arrebatadas de una manera horrible en su propia casa, ubicada en la calle Aramberri en el centro de la ciudad regiomontana.
Después de que las mujeres fueron encontradas en un estado perturbador por don Delfino, esposo de Antonia y padre de Florinda, las investigaciones arrojaron que los maleantes probablemente eran familiares o conocidos, ya que la puerta no había sido forzada y probablemente habían sido invitados a pasar.
Sin embargo las pistas fundamentales para encontrar a los criminales, fueron dos. La primera fue la más tétrica, un loro enjaulado que repetía las últimas palabras de una de las fallecidas. La segunda fue un camino de gotas de sangre, que terminaba en la carnicería de Gabriel, el sobrino de Antonia.
Gabriel, junto con dos familiares y un chofer decidieron despojar a las mujeres de la fortuna que resguardaban en su casa, y para que no los acusaran, estos las condenaron al trágico final que ya conocemos.
Tanto terror, suscitó que el sufrimiento de las difuntas no terminara, pues la gente cuenta que sus espíritus aún habitan la antigua casa, ya que por las noches, gritos de ultratumba resuenan en la antigua construcción.
La peor parte de esta leyenda es que es real… pues yo viví en carne propia, las manifestaciones paranormales del lugar embrujado.
Este aterrador evento pasó hace algunos años, cuando fui con una amiga a la casa de Aramberri, a la cual es prácticamente imposible entrar, puesto que esta repleta de protectores para evitar practicas malignas; ya que es tanta energía oscura la que emanan sus paredes, que la propiedad se convirtió en un imán para los practicantes de brujería, quienes la usaban para realizar rituales diabólicos.
Ya era de madrugada, estábamos afuera de la casa buscando una forma de entrar, cuando de pronto escuchamos unos desgarradores lamentos que provenían desde adentro, parecía irreal pero ambos escuchamos dos gritos largos y de agonía de dos mujeres, una más madura y otra más joven, lo cual encaja perfectamente con el perfil de las mujeres que murieron en la casa”.
Tantos años desolada la casa, y ha llegado el momento de proseguir, pues al parecer el propietario la esta vendiendo en 3,000,000 de pesos, solo por el terreno, pues la construcción ya esta completamente deteriorada, por lo que se tienen que derrumbar los antiguos muros de la casa.
¿Será que ha llegado el momento de Antonia y Florinda de irse a descansar?